Querido estilócrata, casi todo el mundo ha mentido a su pareja alguna vez, ya sea abiertamente o por omisión, en un momento u otro. A veces el engaño se hace consciente o inconscientemente hacia las mujeres, y las mentiras varían en importancia. Hay quien dice que si no hay daño, no hay falta. Pero otras mentiras pueden tener un impacto devastador, como la infidelidad.
Pero la intensión no es abogar por la perfección humana; no existe tal cosa. No somos moralinos. No venimos a juzgar a nadie ni a decir qué es bueno o malo. Más bien, el objetivo es dirigirse a aquellos hombres que buscan respuesta cuando sus parejas son crónicamente furtivas.
Engañar es un tema muy amplio. Las razones son de lo más variadas: el aburrimiento que puede ofrecer una relación de tan largo plazo, la falta de afecto o quizás ninguna de estas, sino que uno de los dos ha conocido a otra persona que ha hecho socavar su vida y sus sentimientos. Pero en la mayoría de los casos, la infidelidad sigue siendo el síntoma de un problema mucho más amplio que tiene que ver con los dos.
En definitiva, todos buscamos algo diferente cuando la rutina y la costumbre se ha impuesto y parece que se ha acabado el amor. O hay casos peores: donde el amor nunca existió y este se busca en alguien más. Y hay muchos modos en que las mujeres buscan a otras personas, no sólo la íntima. Quédate y vamos a hablar de esto punto por punto.
Debes saber que uno de los principales motivos que impulsa al hombre a cometer una infidelidad es el deseo sexual, el atractivo de la otra persona. Esto significa que en muchos casos no existe una gran inversión emocional, se trata simplemente de una aventura que no rebasa el plano físico.
Sin embargo, en el caso de las mujeres, la infidelidad suele ser más peligrosa para la estabilidad de la pareja, ya que en muchas ocasiones existe una inversión amorosa en la relación. La mayoría de las mujeres no buscan exclusivamente una satisfacción sexual cuando deciden ser infieles, sino que quieren añadir pasión y romanticismo a sus vidas. Esto hace que les resulte más fácil involucrarse emocionalmente y poner en riesgo la relación original. En efecto estilocrata, si esta siéndote infiel la cuestión puede ser verdaderamente seria.
Pero hay más engaños que las infidelidades, unos que van allanando el camino hacia el fracaso de la relación. Debes poner mucha atención a lo que vamos a revelarte, podría salvar tu relación, o en el peor de los casos, hacer que te des cuenta que no debes seguir invirtiendo sentimientos en esa persona que ahora consideras tu pareja o tu posible pareja.
1. Las micro infidelidades
Este tipo de infidelidades son muy sutiles y muy frecuentes. Es simplemente seguir el juego de seducción a alguien (dando a entender que está interesada). Un ejemplo es ese típico juego de miradas o en imaginación fantasear con otra persona que no es su pareja.
Todas las mujeres lo hacen incluso en las relaciones más felices. Ellas son coquetas por naturaleza y aún más si son guapas. Pero puede haber una diferencia entre esos cinco minutos extra perfeccionando su vestido, ese extra de maquillaje o esos dos toquecitos más de perfume que de pronto descubres añadiendo, ya que esto puede indicar que alguien a quien quiere impresionar va a estar alrededor.
Pero esto no es exclusivo de una infidelidad, puede ser solamente que le gusta sentirse admirada. Muchas veces esta práctica se da bien por el deseo de validación o de entretenimiento. En este tipo de situaciones solo debes ser observador y cuidadoso. No la castigues por querer verse guapa y sexy, sabes bien que a los hombres nos gusta que nuestras chicas se vean guapas. Sin embargo, no dejes de prestar atención si hay un momento en que lo hace más, o un día en específico…
2. La física
No, no nos estamos refiriendo a la intimidad. Más bien a empezar a tener contacto físico con alguien más. Por ejemplo, quedarse de ver en un lugar específico, como un restaurante a comer, o en un café solo para charlar y conocerse.
Quedar con una persona que le gusta o le atrae para hablar puede no verse tan grave, pero debes saber que debajo de esa “inocente quedada” hay una búsqueda de algo más. En realidad, este tipo de engaño puede ser común pero se debe ser cuidadoso ya que se suele empezar por aquí. Puede ser que te diga que ve a “un simple amigo”, para podría ser que la amistad termine entre las sábanas, incluso las tuyas. ¿Cómo lidiar con ello sin convertirse en un celotípico paranoico?
Bueno, es muy sencillo. Tiene que ver con la confianza, y con el interés de tu pareja en estar contigo o más bien seguir haciendo más y más amistades masculinas. Presta atención estilocrata, si la segunda opción es el caso, entonces es que tu chica sigue sopesando querer tener parejas. Ya lo comprenderás en carne propia, pero cuando estás en una relación y estable en tu trabajo, no sobra mucho tiempo para cultivar tantas amistades. Sólo las laborales o las de antaño. Y cuando se hacen nuevas no se hacen para verse a solas, se suele incluir a las parejas de ambos. No es machismo, es simple sentido común. Y lo mismo aplica al revés por supuesto.
Así que si tu chica suele tener muchos amigos hombres debes ser muy cuidadoso.
“Las mujeres perdonan las infidelidades, pero no las olvida. Los hombres olvidan las infidelidades, pero no las perdona.”
3. La virtual
Hablamos de infidelidad cibernética o virtual cuando una persona ajena a la relación de pareja, de forma oculta y sin el consentimiento del otro miembro, se convierte en objeto del deseo sexual o amoroso de uno de los miembros de la pareja y se mantiene con éste una relación o diferentes encuentros a través del mundo cibernético.
El «sexting» como se le conoce, es el intercambio de fotos o contenido erótico con una tercera persona. Intercambiar palabras que van mas allá de una charla común le encanta a las chicas, seguramente lo sabes. En muchas ocasiones, se comienza como un juego inofensivo y termina siendo mucho más que eso.
Es importante recalcar que este tipo de encuentros no necesariamente se llegan a presentar en el plano físico y muchas veces solo se quedan en el terreno de lo virtual, pero eso no hace que la conexión sea menos poderosa. Es más, podría incluso darse una relación entre dos personas que nunca lleguen a conocerse, dañando en muchos aspectos la relación real. Sin embargo, puede dañar tu relación, pues la persona puede pensar o dedicar más tiempo a su amorío virtual, o puede incluso intentar hacerlo real, lo que sucede la mayoría de las veces. Como tu sabes, muchos hombres no perdonan…
4. La íntima
Aquí empezamos a entrar en terreno pedregoso. Esta infidelidad es la más carnal y está comprobado que para los hombres es la más dolorosa de todas.
En una encuesta las mujeres confesaron que muchas veces su pareja no les satisface en ese terreno, con lo cual tienen que buscarlo fuera. Pero se ha comprobado en estudios que en realidad, este tipo de infidelidad en la mujer no está del todo clara, ya que se sospecha que va más allá del acto sexual y su satisfacción carnal en sí.
Lo que sí es verdad es que tener ganas o no de tener sexo con su pareja también es un factor importante. Cada persona es diferente en lo que a la lívido se refiere. Es obvio que las mujeres que tienen poco deseo sexual, serán menos propensas a ser infieles y las que lo tengan alto pueden verse tentadas a serlo, especialmente si sus necesidades no se satisfacen repetidamente con su pareja.
5. La emocional.
Presta atención ya que se ha demostrado que esta infidelidad es la más peligrosa en las mujeres, ya que puede ser la principal razón de todas las anteriormente mencionadas.
Se empieza por la necesidad de cubrir una parte más emocional y afectiva que solo pasarla bien o tener sexo con alguien más. Y aunque es verdad que todos los seres humanos tenemos necesidades afectivas muy básicas como amar y ser amados, las mujeres son mucho más vulnerables por naturaleza en este tema.
Ellas aman sentirse amadas, es por eso que si sienten que su pareja las descuida constantemente o simplemente ha dejado de cuidarlas en el terreno afectivo, terminarán siendo infieles. Además, dado que están muy vulnerables por la falta de cariño, no solo te engañaran de manera recurrente para llenar ese vacío, terminarán enamorándose de alguien más.